El obispo de la Diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, expresó su rechazo a la legalización de las uniones entre personas del mismo sexo en el estado, argumentando que este tipo de vínculos no pueden ser considerados matrimonio, ya que, desde su perspectiva, dicha figura se refiere exclusivamente a la unión entre un hombre y una mujer.
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| Juan Espinoza Jiménez |
Señaló que esta unión tiene como finalidad natural la procreación y la formación de una familia, la cual consideró como base fundamental de la sociedad.
Monseñor advirtió que hay ideas que se presentan como avances modernos, pero que no por ello deben ser asumidas como buenas o verdaderas.
“Hay cosas que parecen modernas, pero que no por modernas son buenas y verdaderas, solamente pongo en la mesa algunas cosas que se han dado aquí en Aguascalientes, la insistencia por legalizar el matrimonio entre dos personas del mismo sexo, que ya el término no es correcto, porque el matrimonio verdadero auténtico, humanamente y desde la fe, es el matrimonio de un hombre y una mujer, abiertos a la vida", dijo.
En ese sentido, afirmó que el llamado “matrimonio igualitario” no corresponde con la concepción humana ni con la fe que profesa la Iglesia, que defiende la complementariedad de los sexos como pilar esencial para la transmisión de la vida.
"La Iglesia no puede callar y no puede dejar de anunciar la verdad revelada y la verdad humana, la vida se transmite a través de dos personas de diferente sexo y la sociedad se sostiene sobre la familia, fundada como el proyecto de Diosa”, expresó Espinoza Jiménez, haciendo un llamado a la defensa del modelo de familia tradicional.
Finalmente, sostuvo que la familia formada por un hombre y una mujer es el proyecto de Dios y el cimiento sobre el cual debe sostenerse la sociedad.
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