La Iglesia católica enfrenta una preocupante crisis vocacional, advirtió Juan Espinoza Jiménez, obispo de la Diócesis de Aguascalientes, quien señaló que cada vez menos jóvenes y adolescentes muestran interés por el sacerdocio y la vida religiosa.
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Juan Espinoza Jiménez |
“Como Iglesia estamos carentes de personas que dediquen su vida al servicio de Dios”, declaró el prelado, quien recordó que, aunque Aguascalientes es una entidad con una fuerte tradición religiosa —donde el 87% de la población se declara católica—, ya se comienza a resentir la falta de vocaciones.
Explicó que la vocación es “esa llamada de Dios que experimentamos en nuestro interior”, pero lamentó que el entorno actual influya negativamente en las decisiones de vida de los jóvenes. “El mundo actual parece que influye para tener personas con miedos a decidirse en su vocación”, dijo.
Espinoza Jiménez resaltó que el miedo al compromiso es un factor determinante. “En muchos jóvenes, en muchas jovencitas, hay miedo a los compromisos definitivos”, apuntó.
Ante este panorama, el obispo llamó a la comunidad católica a unirse en oración por las vocaciones, especialmente por los jóvenes y adolescentes, “que son el futuro de nuestra Iglesia”.
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