Los puestos ambulantes instalados en el primer cuadro de la ciudad con motivo del Quincenario de la Virgen de la Asunción, no afectan a los negocios establecidos del centro, pues cuando la mayoría de éstos abren sus puertas, los comercios establecidos van cerrando, aunado a que, a través de estos puestos, se permite el poder llevar algo de alimentos a los cientos de peregrinos que diariamente acuden a visitar a la Virgen de la Asunción, señaló el director de Mercados del Municipio, Israel Díaz.
Al respecto, comentó que estos establecimientos no afean el centro, no representan un riesgo y tampoco significan una baja en las ventas para los negocios establecidos, resaltando que se diseñaron pensando sobre todo en los feligreses.
“A veces llegan las peregrinaciones desde las 6 de la tarde, 8, 10 de la noche, hay mucha afluencia de personas y a esas horas los locales del centro están cerrando. Hay que pensar en los feligreses que vienen con toda devoción y entusiasmo a visitar a la virgen, comer algo típico, algo que ofrecen”.
Israel Díaz reiteró que en estos negocios se toman todas las medidas de seguridad a fin de evitar incidentes, pues las diversas dependencias municipales se encuentran al pendiente para corroborar el estado de las instalaciones, los alimentos, entre otros.
Agregó que los comerciantes colocados en la Plaza por el Quincenario “están dispuestos a dar precios muy bajos, muy accesibles y de todo para que los ciudadanos no sean afectados económicamente”.
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