Al unirse aquí al clamor nacional pidiendo paz y justicia, el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, requirió a los aguascalentenses orar para que cese la violencia, misma que dijo, ya ha alcanzado a la entidad, pues tan solo el fin de semana pasado, una ola de violencia azotó a los municipios del interior de Aguascalientes.
Tras repicar las campanas de Catedral y de todos los templos en Aguascalientes, al cumplirse un año del asesinato de los padres jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, monseñor conminó a los aguascalentenses a unirse en oración para que cese aquí la violencia.
Indicó que en nuestro estado "ya hubo clamores de dolor, de violencia, alrededor en algunos municipios fuera de la ciudad de Aguascalientes, ha empezado a haber manifestaciones violentas y en la Diócesis de Aguascalientes en la parte de Zacatecas y Jalisco la violencia es fuerte, las muertes también se han dado y hay mucha gente desaparecida que no se sabe dónde está, cómo está".
Por lo anterior, manifestó que "también en lo cerquita pidamos a Dios por nuestras víctimas, por nuestros hermanos de está querida Diócesis de Aguascalientes y todos unámonos en oración".
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