Ante el cierre de la planta Nissan CIVAC en Morelos, algunos trabajadores podrían ser reubicados a Aguascalientes, informó Verenisse Ruiz, secretaria general de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM).
La dirigente sindical subrayó que este proceso deberá garantizar condiciones laborales justas y equitativas, tanto para quienes sean trasladados como para los trabajadores locales.
Ruiz señaló que uno de los retos será conciliar las diferencias entre los contratos colectivos de ambas plantas, ya que el de CIVAC difiere significativamente del que opera en Aguascalientes. En ese sentido, explicó que no se podrán mantener las mismas prestaciones si los trabajadores de Morelos son recontratados aquí, dado que se incorporarán a una planta distinta y bajo condiciones laborales diferentes.
La secretaria general de CATEM advirtió que no se permitirá un aumento en la carga laboral de los empleados de Aguascalientes como resultado de la integración de nuevos modelos a las líneas de producción. “Tenemos que garantizar la calidad de vida de nuestros trabajadores. No se permitirá que a un mismo trabajador se le asignen responsabilidades adicionales sin la capacitación adecuada ni compensaciones justas”, aseguró.
Asimismo, indicó que el traslado de producción implicaría ajustes técnicos y logísticos, ya que los vehículos fabricados en CIVAC —como camionetas tipo pick up— requieren moldes, maquinaria e infraestructura completamente diferentes a los modelos ensamblados actualmente en Aguascalientes, como el Kicks, Versa, Sentra y March.
Sobre el destino específico de la nueva producción, Ruiz comentó que aún no se ha definido a qué planta de Aguascalientes se trasladarían las operaciones. “Se ha especulado que pudiera ser en las instalaciones de Jatco o incluso en lugar de Compas, pero hasta el momento no hay información oficial. Sería irresponsable adelantar una afirmación de ese tipo”, concluyó.
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